Por: Wenceslao Juárez
Es muy conocido que el Movimiento Antorchista ha sufrido represión política en diferentes estados de nuestro país, principalmente donde gobierna Morena. En los últimos años dicha represión se intensificó en Puebla desde que se negó el registro del MAP, organismo que cumplía todos los requisitos legales para ser partido político.
Desde el mismo estado se desataron “investigaciones” de la UIF (Unidad de Inteligencia Financiera) de Santiago Nieto, congelaron diferentes cuentas bancarias de nuestros líderes por presunta procedencia ilícita, hasta el momento no se tienen pruebas válidas que respalden sus acusaciones.
Con estos y otros hechos, Morena demostró que Antorcha es la única organización capaz de hacer frente a sus malas políticas públicas, la única organización que levanta la voz, los únicos que pueden demostrar que Morena no trabaja a favor del pueblo como lo pregonan. Es clara la percusión política contra Antorcha y sus líderes.
Ese modelo de represión se ha copiado a todos los niveles de gobierno; ha ido escalando hasta llegar a los municipios donde se tienen gobiernos de extracción morenista, como en el caso de Ecatepec de Morelos.
Ecatepec es uno de los municipios más grandes en territorio y población, el grado de marginación y pobreza es alto, por ende, las necesidades de la gente requieren de mucha inversión pública, como en La laguna de Chiconautla, Cd. Cuauhtémoc, Luis Donaldo Colosio, Potrero del Rey, entre otras. Sin embargo, Fernando Vilchis no ha cumplido ninguna de sus promesas al pueblo de Ecatepec.
Existen colonias que no cuentan con lo más indispensable, como pavimento, drenaje ni agua potable, por esto, Antorcha ha sido la única que se atreve a denunciar el mal gobierno de Fernando Vilchis. Acto que ha desatado los encarcelamientos políticos y persecución contra los líderes que se atreven a manifestar todos los atropellos que se cometen en Ecatepec.
En octubre se dieron más de una decena de detenciones en diferentes fechas, con 18 personas detenidas a las que solo se les culpaba por difundir públicamente sus denuncias contra el gobierno municipal. Cabe resaltar que por difundir un volante no se incurre en ningún delito, pero a Fernando Vilchis le incomoda que Antorcha le diga sus verdades.
A pesar de la legalidad de nuestras denuncias y manifestaciones, apegadas a los multicitados artículos constitucionales 6º y 7º de nuestra constitución, Vilchis persigue a líderes políticos, ejemplo a la dirigente antorchista Camelia Domínguez Isidoro.
Fernando Vilchis opta por tomar medidas de represión y persecución en contra de los que atreven a denunciar su mal gobierno, en contra de los que denuncian lo que hace falta en muchas de las colonias de Ecatepec. No estamos de acuerdo con estas medidas de represión.
Las comunidades, colonias y miles de habitantes exigimos seguridad, servicios públicos, alto a los feminicidios y vamos a continuar con nuestra lucha, denunciando los atropellos y defendiendo los derechos de las familias de Ecatepec.